
Portugal vivió una noche calamitosa en su visita a Dublín, cayendo por un contundente 2-0 frente a una aguerrida Irlanda que complica sus aspiraciones de asegurar un cupo directo al Mundial de 2026. La frustración portuguesa quedó personificada en su capitán, Cristiano Ronaldo, quien fue expulsado por una agresión y culminó una de sus actuaciones más decepcionantes con la selección .

Parrott, el Héroe Inesperado de Irlanda
A pesar de que Portugal dominó la posesión del balón con más del 80% en los primeros 15 minutos, fue incapaz de generar peligro real sobre la portería de Caoimhin Kelleher . Irlanda, con una estrategia clara de defensa sólida y contraataques con balones largos, supo aprovechar sus oportunidades.
El primer golpe llegó tras un error defensivo de Gonçalo Inácio, que derivó en un córner. En la jugada siguiente, Troy Parrott apareció para marcar el 1-0 y desatar la euforia en el Aviva Stadium . Justo antes del descanso, el mismo Parrott firmó su doblete con una gran jugada individual, recortando desde la izquierda y definiendo por debajo de las piernas de Rúben Neves para poner el 2-0 . La noche ya se perfilaba oscura para Portugal y para un Cristiano Ronaldo cada vez más aislado en ataque.

La Frustración Supera a Cristiano Ronaldo
La segunda mitad comenzó con la misma tónica, pero con un Portugal cada vez más desesperado. La frustración era evidente en el rostro de Cristiano Ronaldo, quien recriminaba a sus compañeros por la falta de precisión en el último pase .
Alrededor del minuto 60, la tensión explotó. En un momento de calentura, Cristiano Ronaldo propinó un codazo en la espalda al defensor Dara O’Shea. Tras la revisión del VAR, el árbitro no dudó y le mostró la tarjeta roja directa al jugador de 40 años, quien abandonó el campo haciendo gestos de llanto a la grada local . Su actuación, que había comenzado con intentos fallidos y poca participación, terminó de la peor manera, recibiendo una calificación de 2/10 por su pobre desempeño y expulsión .

Un Futuro Incierto para Portugal
Con diez hombres, Portugal fue un equipo sin ideas, incapaz de romper el muro defensivo irlandés. El equipo dirigido por Roberto Martínez pareció carente de un plan B cuando su máxima estrella, Cristiano Ronaldo, no está en su día, lo que genera serias dudas de cara a un torneo tan importante como el Mundial . El único intento de peligro real fue una volea de Gonçalo Ramos que exigió una buena parada del portero local .

Ahora, Portugal se ve obligado a ganar su próximo partido contra Armenia para poder sellar su clasificación al Mundial de 2026, una situación de alta presión que se pudo haber evitado . La derrota no solo evidencia problemas tácticos, sino también una preocupante dependencia en el estado de forma y ánimo de Cristiano Ronaldo
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